jueves, 8 de enero de 2009

NOCHES FRÍAS


Y días también.
Gélidas mañanas a contratiempo... época de rebajas prometidas que se quedan en nada...

Volvemos a aparecer después de ausentes días festivos, entre dulces y cava, entre risas y duelos... Días extraordinarios de entrañable compañía, sorpresas y regalos, coronas de cartón doradas y de colores que prometen reyes merecidos, nuevas ilusiones, y una noche amena.... y así fue. Pequeños ojos inmensos y brillantes, rostro lleno de alegría... y con su pequeña corona de cartón nos conquistó a todos. Noche amena... de armonía risueña, burlas, ironía y carcajadas.

Y hoy, un profundo frío.
Manos enfundadas en torpes guantes que ni siquiera saben llamar al ascensor... y menos coger las llaves.

Profundo invierno de luna fría cuyo reflejo casi glacial nos invita a buscar refugio en nuestros propios hogares, que conseguimos cálidos a fuerza de calefacción artificial y a veces, humana con abrazos continuos y frotes en la espalda, nos miramos a los ojos y nos gusta lo que vemos.

2 comentarios:

Murgan dijo...

Un beso, preciosa mujer. Que ya sé que andas bien servida en casa, pero seguro que una mano amiga nunca te sobra...

Maria Máñez dijo...

Las manos amigas nunca sobran y miradas francas nunca hay en exceso, como palabras de aliento y presencias escritas en una sola palabra.

Gracias por estar ahí, Murgan... también puedes contar con mis manos.