viernes, 15 de mayo de 2009

MÁS MAGIA, POR FAVOR.


Lejos de hacer un análisis exhaustivo de la obra completa, ni de juzgar gustos literarios, ni fenómenos económicos... solamente centrada en la obra literaria y en su metáfora, me atrevo con este post.


Me he leído toda la obra, libro tras libro, capítulo tras capítulo y página tras página... Lo echaré de menos... pero tenía que terminar. Fantástica obra que el cine ha sabido plasmar y explotar sus más detallados efectos especiales, estéticas sublimes, y diálogo, en más de una ocasión, sin desperdicio. Fantástico tejido de personajes y ahora que sé el final, que cada uno de los sucesos (de miles de sucesos) tienen su porqué, entiendo la obra como un gran universo metafórico lleno de claros, insinuantes y subliminares mensajes para esta nueva humanidad.


Más allá de la exposición del bien y del mal, más allá de la magia donde todo es posible, donde nada es lo que parece y los personajes no sucumben fácilmente a los terroríficos, peligrosos e inesperados acontecimientos... la historia se cierra como un círculo perfecto... que "no tiene ni principio ni fin" pero que engloba una gran obra de arte; filosófica incluso (ostento en decir) en la que valores como el compromiso, la congruencia con uno mismo, la responsabilidad, la lealtad, la honestidad, la humildad, el valor y el uso del poder para y con los demás son una gran lección que ha calado más allá de nuestro consciente. O al menos eso espero.


De final tal vez esperado, cada uno recoge lo que ha sembrado: el poder para con uno mismo se vuelve en contra del malvado Voldermort, su ávido deseo de matar a su rival lo hace víctima de su propio maleficio... (muy común en historias cotidianas en las que se pretende alcanzar una gloria sin habérsela ganado); mientras que en momentos desesperados, una vez más Harry se encuentra con todo un ejército de seguidores, de afines, de leales compañeros dispuestos a morir no por él, pero si por la causa que él, de manera predestinada, inició... (más común en la "vida real" de lo que nos imaginamos, donde tal vez nadie muere por nadie pero sí que en alguna ocasión y a punto de tirar la toalla nos hemos encontrado una mano amiga que nos ha empujado a seguir...)


Y es como en toda obra de arte... siempre es más de lo que se expone, de lo se ve, de lo que se lee... siempre hay una intención por parte de sus autores y creadores, siempre hay un mensaje... una metáfora donde el término mágico se corresponde con el término real, y a veces se confunden (interesante encuentro) ... y así cuentan la historia, y así enseñan, y así despiertan mentes, pasiones, incluso curiosidad... Y ya lo dijo alguien... la curiosidad es el principio del conocimiento.


Solamente deseo que J.K. Rowling no deje de escribir, que siga contando historias y que nos envuelva una vez más en cualquiera de sus universos mágicos.

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