DES DEL SUELO

Caminamos mirando al frente, mirando hacia abajo, a veces tras escuchar un sonido nos giramos hacia los lados buscando su procedencia... y de vez en cuando, sólo de vez en cuando, nos giramos hacia atrás por si nos sigue alguien... Y qué pocas veces miramos hacia arriba.

Des del suelo podemos hallar impresionantes vistas... es un punto de vista excepcional, único... Cuando no sé dónde ir, miro hacia arriba, tal vez no encuentre la respuesta, pero el cielo ha despertado diferente, tal vez un avión lo ha cicatrizado y más allá parece que se despeja el temporal.

Sin duda, mirar des del suelo tiene sus ventajas, nos ayuda a "ver" de diferente manera, nos "saca" de nuestros andares rutinarios y monótonos, de nosotros mismos y de nuestros quebraderos de cabeza... Más allá de ella, las copas de los árboles, las nubes, el cielo y el infinito... nos invitan a sentir, a meditar, a respirar nuevos aires.

Y creer que los cambios traen algo mejor, que el estancamiento pudre las aguas y que siempre nos quedará mirar hacia arriba, hacia lo más alto... con los pies en el suelo.

ALMENDROS

Después de pasar un largo invierno, se agradece ver el sol, el nacimiento de una flor* [*Luz Casal]

Todo vuelve...

De nuevo estalla la flor del almendro y nos advierte que ya se acerca la primavera dejando el invierno y todo lo que se quedó atrás, que a veces vuelve pero con el sol sobre nuestras cabezas es diferente, sobrevivimos mirando al frente... y ver de nuevo las flores con ganas de exhibir su belleza, su luz... su esplendor... tan breve y dispuesto a morir por un nuevo fruto que alimentará nuevos amores... o los de siempre.

Ya la luz crea nuevos contrastes, se cala entre la naturaleza para brindarnos nuevas albas tornasoladas, nuevas tardes largas y ganas de salir... nueva energía que nos envuelve de optimismo, arando nuestras tierras, labrando nuestras siembras y cultivando nuevos frutos para otros tiempos.

Y todo vuelve...

Ciclos que emprenden nuevos recorridos de los cuales sin duda aprenderemos nuevas maneras de ver, de vivir, de trabajar, incluso de soñar despiertos. Buena época para la reflexión, el raciocinio y la creatividad... buscando siempre nuevas maneras, nuevos caminos, nuevas gentes... Como las flores... que vuelven en primavera, pero nunca son las mismas que el año anterior.